SEGUNDO ENCUENTRO NACIONAL DE
BIBLIOTECAS MÓVILES. SANTIAGO DE CHILE.
El día 4 de
noviembre tuvo lugar en Santiago de Chile, el
II Encuentro de la Red Nacional deBibliotecas móviles que enlazó, los
días 5 y 6, con el III Seminario Internacional de Bibliotecas Públicas, bajo el lema: “Lecturas
en movimiento”, y en el que los bibliomóviles también
tuvieron un papel destacado.
Fue un grato placer
poder compartir con todos ellos mis experiencias en el campo de los bibliobuses
a través de la conferencia: Los ServiciosBibliotecarios Móviles, parte de una red bibliotecaria, cultural y social: laexperiencia de los bibliobuses de Lleida (Catalunya), y del Taller: “Evaluación,
análisis y diseño para el desarrollo de servicios móviles”.
El resumen de las actividades puede seguirse en excelentes reseñas, una de
ellas, Bibliomóviles chilenos reciben impulso extra tras II Encuentro en la Red.
A través de este
post me gustaría compartir mis impresiones de estos días, que considero que me han aportado mucho
más de lo que yo les haya podido
ofrecer.
De entrada diré que la Red Nacional de Bibliobuses de Chile, es un colectivo valiente y motivado, que conoce su oficio y que sabe identificar sus necesidades para poder ser más eficientes.
Creo que están acabando una fase de lanzamiento por la que
todos hemos pasado, que se caracteriza por unos años de experimentación,
aprendizaje, mucha voluntad y de disponer de diferentes modelos en función de
los medios de que disponen y las características de la región donde operan.
En sus
diferentes áreas geográficas algunos de ellos se han consolidado como elementos
referentes donde la figura del personal del bibliomóvil es básica para la dinamización cultural y educativa en sus comunidades.
Se aprecia una
firme apuesta por parte del Servicio Nacional de Bibliotecas Públicas (SNBP), de la Dirección Nacional de Archivos, bibliotecas y Museos (DIBAM) sobre el desarrollo
de estos servicios bibliotecarios. Gracias a ello entran en un proceso
imparable de consolidación y profesionalización tanto de los servicios como del
personal, que en el marco del Encuentro
han definido lo que es preciso gestionar para poder asegurar su mantenimiento, y por tanto, su futuro.
La estructuración
de estos dos encuentros profesionales y la oportuna edición de las Pautas
IFLA sobre bibliotecas móviles, [i]
son una buena muestra de ello.
Creo que disponer
de pautas y de formación servirá para identificar más y mejor sus servicios, y
para poder situar su papel en el marco de los servicios bibliotecarios regionales.
En paralelo se
evidencia que continuará el impulso a las tecnologías de la
información y a las redes sociales como herramienta de trabajo y comunicación,
tanto entre los “bibliomóvileros” para poder compartir experiencias y recursos,
como también entre los bibliomóviles y las entidades culturales y educativas en
sus respectivas comunidades.
A destacar en
este II Encuentro…, la aportación del
portugués Nuno Marçal, se confirmó como
referente entre los “bibliomovileros”
chilenos.
Triunfaron dos
conceptos que se hicieron suyos a partir
del primer día el resto de sus compañeros y los mismos ponentes del Seminario, en referirse al espíritu del servicio de las
bibliotecas móviles:
“los bibliobuses y los bibliomóviles, respecto
a las biblioteca públicas, no somos mejores ni peores, somos diferentes.” Y
“sentimos lo mismo, porque hacemos lo mismo”.
Cuando se
refirió “que somos”, lo resumió como: espacios de libertad, promoción del libro y la lectura, libre acceso
a la información y el conocimiento y, dar servicios útiles a la comunidad.
Nuno hizo especial
hincapié en la dimensión social de su trabajo: a la proximidad, complicidad,
intimidad e incluso amistad con sus “lectores”. Todo ello sin olvidar que el
futuro pasará por utilizar: espacios virtuales, creatividad, imaginación y fortalecer
el capital humano.
Sus aportaciones diría que fueron fuente de conocimiento, expresadas con corazón y mucha humanidad. No
hay que decir que se ganó el aplauso y voluntad de todos los congresistas.
Para acabar este
resumen diré que una de las mayores virtudes de estos encuentros es poner piel
a los contactos virtuales y conocer otros que, a partir de ahora, podremos continuar gracias
a las redes sociales. Me refiero a: Rodrigo Elorza, Alfredo Fica, Hernán Gallardo, José Antonio Juliá… y los que ahora no menciono, pero sí que les
recuerdo con afecto. Todos ellos (les pido que permitan mi comentario), capitaneados estos días por Daniela Osorio bibliotecaria, “bibliomovilera” y nuestra cicerone particular
en Santiago.
Han sido horas
apretadas y ricas en experiencias, en
compartir posicionamientos, diferentes
formas de trabajo y vida. La conclusión
es que en todas partes del mundo los servicios bibliotecarios itinerantes se
llamen bibliobuses o bibliomóviles, forman
una gran familia.
Felicito al SNBP
por la organización del Encuentro y el Seminario. Mis deseos que continúen esta
línea de consolidación y expansión de estos servicios por las regiones de
Chile.
[i] IFLA (International Federation of Library Associations
and Institutions), traducidas por el Grupo de Trabajo de la Asociación de
Profesionales de Bibliotecas Móviles de España (ACLEBIM),